El Lider de la Celula (1ra parte)Persona clave en el discipulado cristiano. El líder de célula.
El liderazgo ejercido por Jesús y la extensión del mismo hecho por sus seguidores fue la clave para que la iglesia primitiva se extendiera más allá de las fronteras de Israel hasta hacer tambalear los cimientos del Imperio romano. El testimonio de cada cristiano y hacer discípulos persona a persona son el modelo bíblico para el crecimiento de la Iglesia en estos tiempos. Por Marino M. Muñoz
El líder de célula coordina el trabajo que hace el grupo, por eso es un miembro clave, pero el estudio no se centraliza en él. El líder es un guía que está presente como un miembro más. La autoridad del estudio no es él sino La Biblia. Todos los miembros de la célula preguntan, contestan y comparten un tema central pero es el líder quien debe coordinar esta actividad.
En el caso de las preguntas que él mismo debe formular al grupo, hasta puede hacerlas directamente a una persona en particular si desea, pero debe cuidar que todos estén participando. Es por esto que muchas personas que son "buenos predicadores" no sirven para dirigir un grupo de esta naturaleza.
El líder debe tener estas particularidades:
1. Debe ser honesto: Ser honesto es fundamental para poder ser líder. Esta actitud lo llevará a ser lo suficientemente sabio como para poder admitir delante de cualquiera que no lo sabe todo y que de esa manera puede recibir ayuda de los otros miembros del grupo. Esta situación hace posible la interacción, pues si la actitud del líder de célula no se muestra como un miembro más y de veras así lo siente y lo practica, creará un problema insalvable de comunicación.A lo mejor, si le hacen una pregunta que no sabe responder, o el grupo ha ido en su participación abierta a un punto donde se requiere seguridad, y el líder no puede brindar la contestación o «la última palabra» de la discusión, es mejor que diga sencillamente: "no sé". Buscaremos sobre este tema en la Palabra de Dios, o trataré de asesorarme acerca de lo que están necesitando... Es la mejor manera de ser un líder que quiere de veras discipular con ejemplos al grupo.¿Sabe lo que puede pasar en el grupo si el líder contesta categóricamente sobre una pregunta y luego descubren que está totalmente equivocado? Cae su imagen, la confianza, el respeto, etc. Luego ¿cómo hace para poder seguir siendo el líder? Es mejor ser honesto (1 Corintios 7:35; Filipenses 4:8).Sin embargo, es obvio, el líder tiene que prepararse muy bien para la reunión de célula. Debe conocer muy bien el manual para células que es el material que maneja. Debe saber exactamente a dónde quiere llevar el grupo, debe depender del Espíritu Santo si quiere bendecir a otros y debe aprender cotidianamente de la Palabra de Dios. ¡Debe buscar respuestas a sus propios interrogantes!
2. Desea el crecimiento para sus hermanos: (Colosenses 1:1O-11; 2:18-19; Efesios 4:14-16; 2 Pedro 3:17-18). El líder debe estimular a los participantes a interesarse en las cosas que son realmente importantes en la Palabra de Dios. Por ese motivo el líder es considerado como «un hacedor de discípulos», participando en la formación de esas vidas. Si se apunta al crecimiento individual se debe tener entonces como resultado nuevas vidas en Cristo. El líder entonces no debe apuntalar solamente el conocimiento intelectual, sino que los lleva a la obediencia, a Cristo, siendo él el modelo. Quien pretende formar discípulos debe primeramente ser discípulo. Esto no quiere decir que cuando son líderes dejan de ser discípulos, sino que juntos con todos siguen cada vez más de cerca a Jesucristo. (Iglecimiento.com)
El líder de célula coordina el trabajo que hace el grupo, por eso es un miembro clave, pero el estudio no se centraliza en él. El líder es un guía que está presente como un miembro más. La autoridad del estudio no es él sino La Biblia. Todos los miembros de la célula preguntan, contestan y comparten un tema central pero es el líder quien debe coordinar esta actividad.
En el caso de las preguntas que él mismo debe formular al grupo, hasta puede hacerlas directamente a una persona en particular si desea, pero debe cuidar que todos estén participando. Es por esto que muchas personas que son "buenos predicadores" no sirven para dirigir un grupo de esta naturaleza.
El líder debe tener estas particularidades:
1. Debe ser honesto: Ser honesto es fundamental para poder ser líder. Esta actitud lo llevará a ser lo suficientemente sabio como para poder admitir delante de cualquiera que no lo sabe todo y que de esa manera puede recibir ayuda de los otros miembros del grupo. Esta situación hace posible la interacción, pues si la actitud del líder de célula no se muestra como un miembro más y de veras así lo siente y lo practica, creará un problema insalvable de comunicación.A lo mejor, si le hacen una pregunta que no sabe responder, o el grupo ha ido en su participación abierta a un punto donde se requiere seguridad, y el líder no puede brindar la contestación o «la última palabra» de la discusión, es mejor que diga sencillamente: "no sé". Buscaremos sobre este tema en la Palabra de Dios, o trataré de asesorarme acerca de lo que están necesitando... Es la mejor manera de ser un líder que quiere de veras discipular con ejemplos al grupo.¿Sabe lo que puede pasar en el grupo si el líder contesta categóricamente sobre una pregunta y luego descubren que está totalmente equivocado? Cae su imagen, la confianza, el respeto, etc. Luego ¿cómo hace para poder seguir siendo el líder? Es mejor ser honesto (1 Corintios 7:35; Filipenses 4:8).Sin embargo, es obvio, el líder tiene que prepararse muy bien para la reunión de célula. Debe conocer muy bien el manual para células que es el material que maneja. Debe saber exactamente a dónde quiere llevar el grupo, debe depender del Espíritu Santo si quiere bendecir a otros y debe aprender cotidianamente de la Palabra de Dios. ¡Debe buscar respuestas a sus propios interrogantes!
2. Desea el crecimiento para sus hermanos: (Colosenses 1:1O-11; 2:18-19; Efesios 4:14-16; 2 Pedro 3:17-18). El líder debe estimular a los participantes a interesarse en las cosas que son realmente importantes en la Palabra de Dios. Por ese motivo el líder es considerado como «un hacedor de discípulos», participando en la formación de esas vidas. Si se apunta al crecimiento individual se debe tener entonces como resultado nuevas vidas en Cristo. El líder entonces no debe apuntalar solamente el conocimiento intelectual, sino que los lleva a la obediencia, a Cristo, siendo él el modelo. Quien pretende formar discípulos debe primeramente ser discípulo. Esto no quiere decir que cuando son líderes dejan de ser discípulos, sino que juntos con todos siguen cada vez más de cerca a Jesucristo. (Iglecimiento.com)
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